En La Rioja, a las afueras del pequeño pueblo de Ollauri, con poco más de 300 habitantes, nos encontramos con la bodega Marqués de Terán. Leído así parece que nos remontemos a muchos años atrás, que estemos ante una bodega de las de tradición, con procesos pasados de padres a hijos y decenas de años de historia.

Pero nada más lejos de la realidad. Esta bodega, nacida en 2004 con el nombre de Regalía de Ollauri, es pionera a nivel mundial en sus técnicas. Desde su construcción hasta la maceración de sus caldos, todo aquí es innovación, gracias a la gran inversión en I+D+i por la que se apostó desde sus inicios.

Marqués de Terán cuenta con un contemporáneo edificio (Premio de arquitectura Aluminier Technal 2007) prácticamente camuflado en el paisaje riojano, en lo alto de un cerro con vistas a la pintoresca villa de Ollauri.

Bodega Marqués de Téran

Pero lo interesante en esta bodega no es lo que se ve: El 80% de sus instalaciones están soterradas, con 3 propósitos principales:

  • Un edificio integrado totalmente en el paisaje
  • Aprovechamiento de la temperatura estable que proporciona la propia tierra (geotermia)
  • Cuidar todo el proceso sirviéndose de la fuerza de la gravedad para desplazar el producto por dentro de la bodega

Aunque no todo es el edificio: Casi toda la uva utilizada en la elaboración de sus vinos es de viticultores de la zona, con viñedos con una media de edad de 25 años, y de variedades típicas de la zona: Tempranillo, Mazuelo y Garnacha.

Marqués de Terán presume de “hacer el vino desde el viñedo”, y es que, meses antes de la vendimia, las cepas son descargadas de parte de su fruto, para así vigorizarla y mejorar la calidad de la uva que finalmente será utilizada.

Viñedos Marqués de Téran

Toda la producción es recogida a mano en cajas de 17kg, evitando así el aplastamiento de los frutos. Al llegar a la bodega, la uva cae por su propio peso mediante un sistema de cintas vibratorias hasta la mesa de selección, donde se despalilla, y solo los mejores frutos se seleccionan para elaborar el caldo.

Una vez seleccionada la uva, esta va a parar a un innovador sistema que combina la técnica del pissage con la criomaceración, técnica utilizada habitualmente en los vinos blancos, pero que en este caso lo es también para los tintos. La criomaceración consiste en aplicar nieve carbónica a la uva recién prensada, para así reducir su temperatura durante un tiempo y aumentar tanto el color como los aromas del mosto. La nieve carbónica pasa de estado sólido a gaseoso sin pasar por el líquido, así que cuando hay que aumentar la temperatura, no disminuye la calidad del mosto.

A partir de aquí, la bodega Marqués de Terán es la primera del mundo en utilizar la geotermia para la elaboración de sus vinos, el sistema menos contaminante del planeta.

La geotermia es una energía totalmente limpia y renovable que hace que, a 100 metros de profundidad, haya una temperatura constante de entre 14 y 18 grados. Se aprovecha esta temperatura mediante un circuito cerrado de agua que capta esa energía en forma de calor y, a través de una bomba de frío-calor geotérmica (agua-agua, con cero emisiones de CO2), sube o baja la temperatura en función de la época del año y las necesidades de elaboración de la bodega en cada momento.

Gracias a estos sistemas innovadores, la bodega produce unos vinos exquisitos con excelentes valoraciones por expertos nacionales e internacionales, acumulando variedad de medallas y premios en diferentes certámenes.

Marqués de Terán 2018

Marqués de Terán Selección Especial 2017

Versum 2017

Gourmetea, tienda especializada en productos gourmet

Directamente del productor a tu mesa