El queso además de estar delicioso y ser un alimento de origen milenario, se considera pieza indiscutible dentro de una dieta saludable y equilibrada.
«Vino y queso saben a beso; jamón, queso y vino a beso divino»
Existe una gran variedad de quesos y los podemos encontrar de vaca, oveja, cabra y hasta de búfala, mezcla (de varias leches) tiernos, curados, semi curados, frescos, azules… de sabores, texturas y aromas de lo más variopinto. Todos ellos tienen en menor o mayor medida beneficios para la salud.
Su valor nutritivo varía en función del tipo de leche y las características del producto.
Beneficios del queso
Es rico en minerales que intervienen en infinidad de procesos metabólicos. Te contamos cómo nos ayudan:
- El fósforo es un mineral esencial en nuestro organismo que ayuda en el desarrollo y mantenimiento de huesos y dientes, interviene también en la formación de ADN y ARN.
- Calcio, mineral imprescindible en la formación de huesos y dientes, y ayuda en la lucha contra la osteoporosis.
- Potasio, mineral fundamental en nuestro organismo por participar en funciones básicas.
- Selenio, es entre otros antioxidante, anticancerígeno y antiinflamatorio.
- Zinc, beneficia el sistema inmunitario y el crecimiento, y previene la caída del cabello.
- Magnesio, entre otros tiene efectos antiinflamatorios, puede ayudar a reducir la presión arterial.
- Sodio aporta energía, es vital para el funcionamiento del sistema nervioso y contribuye en la regulación de la presión arterial.
Nos aporta proteínas de alto valor biológico, esto quiere decir que son ricas en aminoácidos indispensables para nuestro metabolismo y de fácil asimilación.
¿Sabías que el queso…?
Piel radiante
Contiene gran cantidad de ácido fólico (vitamina B9, fundamental para la salud, sobre todo, en el embarazo y desarrollo del niño ya que previene malformaciones en el cerebro y columna vertebral) y otras vitaminas del grupo B, que nos ayudan a mantener una piel sana.
La caries bajo control
Estimula la producción de saliva, por lo que contribuye a reducir la formación de placa bacteriana y por ende la aparición de caries.
Un bocado feliz
Contiene tirosina, importante componente de la dopamina, hormona neurotransmisora que regula el placer, el humor, el aprendizaje y la atención, también llamada hormona de la felicidad.
Dulces sueños
Es rico en triptófano, aminoácido esencial que promueve la liberación de serotonina, por lo que interviene en la regulación del sueño y el placer.
La Salud Pública de Reino Unido emitió un informe dirigido a la población con sobrepeso en el que comunicaba: «Comer una dieta rica en productos lácteos enteros como el queso, la leche y el yogur puede reducir el riesgo de obesidad.»
De hecho hay estudios como el publicado por la Federación Española de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD) que afirman que no influyen ni aumenta los niveles de colesterol, sino que por el contrario ayuda a regular la presión arterial.
Comer queso no debe ser un capricho puntual
Como todo alimento, sin exceso, una porción diaria nos aporta los beneficios recomendados en una dieta saludable.
Igual de importante es incorporar el queso en nuestra alimentación como que sea de calidad para sacar el máximo provecho de sus nutrientes.
Desde Gourmetea recomendamos elegir productos de proximidad de productores locales, a poder ser elaborados artesanalmente, lo más mínimamente procesados para conservar toda sus propiedades y beneficios.
Y por supuesto, no nos olvidamos del placer, el placer que nos producen sus aromas, sus sabores y sus texturas, a leche, campo, mantequilla, frutos secos, tierra… Actualmente hay tanta variedad en el mercado como gustos y preferencias.
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